Un campeón que desafía sus propios límites: Genaro Pirles y la medalla de plata en los Juegos Evita

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• Es oriundo de la localidad de Serrano, a 380 km al sur de la ciudad de Córdoba, y en menos de un año se consagró campeón de Para Powerlifting.
• En noviembre, ganó la medalla de plata en los Juegos Evita formando parte del equipo de Sitting Vóley. 

La historia de Genaro Pirles es de esas que inspiran a soñar y a seguir adelante, sin importar los obstáculos. A sus 18 años, este joven oriundo de Serrano ha demostrado que la pasión y la determinación pueden superar cualquier barrera. 

Todo comenzó en el atletismo, donde Genaro participó en varias ediciones de los Juegos Evita siendo apenas un niño. Pero, como ocurre con quienes no temen dar un paso más allá de sus propios límites, su pasión lo llevó a un nuevo rumbo. En el año 2023, se adentró en el mundo del parapowerlifting, que consiste en el levantamiento de potencia en un press de banca, y en menos de un año se consagró campeón Parapanamericano en Colombia, levantando 97 kg.

Este resultado fue solo el comienzo de una carrera que promete seguir sorprendiendo ya que, en el último torneo nacional en San Martín de los Andes, estableció un nuevo récord al levantar 117 kg. Hoy ya lo consideran una de las grandes promesas argentinas para los próximos Juegos Parapanamericanos en Chile y, más allá, para los Juegos Paralímpicos de Los Ángeles en 2028.

Un desafío inesperado

El camino de Genaro no fue sencillo ni mucho menos lineal. A los siete años, un accidente cambió su vida de forma drástica: perdió una pierna, pero no su amor por el deporte. “A los 7 años tuve un accidente; andando en bici me atropelló un camión y me tuvieron que amputar para salvarme”.

Este año, los recortes presupuestarios le impidieron competir en los Juegos Evita en su especialidad, el powerlifting. Sin embargo, decidió aceptar un nuevo desafío en el Sitting Vóley. Y no solo se adaptó rápidamente a esta disciplina, sino que fue una de las piezas clave para que el equipo de Córdoba alcanzara la medalla de plata en la competencia. 

 “Fue una experiencia diferente, pero estoy feliz de haber compartido este momento con mis compañeros y aprender algo nuevo”, dice con humildad, reafirmando que, para él, cada reto es una chance para crecer.

Adaptarse a esta nueva disciplina no fue fácil, pero él siempre ha visto cada cambio como una oportunidad para aprender. De hecho, recuerda con gratitud que fue en los Juegos Evita donde descubrieron su potencial; “Los Evita son una gran oportunidad. Yo salí del power, me vieron acá en 2022, me contactaron y en febrero me llamaron”.

Inspiración para Serrano, Córdoba y el país 

Además de sus logros deportivos, Genaro se ha convertido en un ejemplo de resiliencia y superación para su comunidad. Desde su accidente a los siete años, que cambió su vida al perder una pierna, hasta sus logros actuales, su historia es un testimonio de que las barreras pueden superarse con esfuerzo y determinación. 

En Serrano, su localidad natal, y en Córdoba, donde entrena en el Polo Deportivo Kempes, es reconocido no solo por su destreza deportiva, sino por su humildad y su capacidad para inspirar a otros jóvenes.  “El deporte fue una oportunidad para salir adelante, y me funcionó bastante bien. Sigo adelante y el año que viene voy a competir en un panamericano”, afirmó el serranense con entusiasmo. 

Con su medalla de plata y la mirada puesta en nuevos objetivos, Genaro Pirles continúa siendo un ejemplo de lucha, superación y amor por el deporte dejando claro que, cuando se pelea por lo que se ama, los límites son solo una ilusión.

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